Espíritu de Redención y Vida,
Espíritu Santo que todo restaura e ilumina,
desciende sobre los corazones que Te aguardan,
colma los corazones que Te llaman,
renueva las esencias de los que padecen en el mundo.
Despierta Tus Dones en los que aspiran a servir eternamente a Dios.
Despierta Tu Espíritu en los corazones del mundo
y en todos ellos encuentra Tu Eterna Morada,
para que la Gloria de Dios se manifieste en la Tierra
y lo Sagrado retorne a vivir en este mundo.
Amén.