Nuestra Señora Aparecida: una devoción que dialoga con la esencia del pueblo brasileño



"Hoy, hijos Míos, se cumple el aniversario en el que el Padre Celestial decidió revelar a unos humildes pescadores la faz de la Señora Aparecida; faz que protege y ampara al Brasil como país, pero una faz que también llegó en aquel tiempo a las manos de los pescadores a fin de destituir para siempre la esclavitud y el sometimiento de los negros y de los africanos."

Virgen María, 12.10.2019



A lo largo de la historia, la Madre Divina se ha manifestado por el mundo por medio de diferentes Faces, que cargan los atributos espirituales que cada pueblo necesita más.

El 12 de octubre se conmemora la fiesta litúrgica de Nuestra Señora Aparecida, patrona y protectora del Brasil. En esa fecha, festivo nacional desde 1980, millones de brasileños expresan su amor y devoción a la Virgen Negra.



¿Pero cómo surgió la devoción a Nuestra Señora Aparecida? 

En 1717, tres pescadores encontraron una imagen negra de Nuestra Señora de la Concepción, hecha de cerámica, mientras lanzaban su red de pescar en el río Paraíba del Sur, en el interior de San Pablo. El ícono, que tenía 36 centímetros de altura y 2,5 kilos, surgió en dos pedazos: primero el cuerpo y después la cabeza. De ahí viene el nombre "aparecida". A partir de entonces, diversos milagros se asociaron con la santa.

La Madre del pueblo negro

Los investigadores creen  que la imagen adquirió el color negro por permanecer muchos años sumergida en el agua. Independentemente de los procesos físicos involucrados en el milagroso acontecimiento, el hecho es que Nuestra Señora Aparecida pasó a representar al pueblo negro, que compone más de la mitad de la población del Brasil.

Esto es confirmado por la propia Virgen María, en Su Mensaje del 12 de octubre de 2016, transmitido al vidente Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús: 

Yo soy la Virgen Negra, soy la Madre y Reina de los antiguos esclavos. Soy la que está en el Brasil para protegerlo de la dominación y del caos de estos tiempos.

...Aquí, en estas tierras, Yo he aparecido para dar testimonio sobre la libertad y amparar a toda la raza negra, raza original de esta humanidad y que fue diezmada por la raza blanca.

Vine al Brasil como la Virgen Negra para poder unir a los pueblos y a las naciones a través de la cultura, de la lengua y de la divina espiritualidad.

La Virgen Aparecida viene a curar el pasado y a cerrar las puertas a la esclavitud que tuvo lugar entre África y América.

Virgen María, 12.10.2016



La Protectora de los humildes y de los oprimidos 

Las circunstancias del surgimiento de Nuestra Señora Aparecida revelada al mundo por las manos de tres hombres simples, también contribuyeron para que Ella pasase a ser considerada la protectora de los más humildes y sacrificados. Y, realmente, en el Mensaje citado, María Santísima se anuncia como la Abogada y la Intercesora de todos los brasileños explotados y maltratados:

Hoy vengo a salvar a los que son marginados y explotados en este tiempo; por eso, soy la Virgen Negra del Brasil.

He aparecido en estas tierras para presentarles a Mis hijos el espíritu de la igualdad y de la justicia. Vengo a cortar las cadenas de los errores que se viven en este pueblo y a conducir a las consciencias hacia la Gracia y la Misericordia de Dios.

...Soy la Consoladora del sufrimiento humano.

Soy la Jueza Universal de todos los pueblos.

Soy la Abogada del Brasil.



La Guardiana de la naturaleza del Brasil

Como Nuestra Señora Aparecida, la Madre Celeste también dice tener la tarea de celar por la naturaleza del Brasil y por los pueblos que son los guardianes originales de esa vida natural. 

Soy la Guardiana de la belleza natural del Brasil; por eso, imploro a todos Mis hijos que protejan el precioso edén que es el Brasil.

Les pido que no persigan más a los inocentes, les pido que protejan la paz en el edén del Brasil.

Virgen María, 12.10.2016

Al referirse al Brasil como el “Edén”, Nuestra Señora le muestra a los brasileños cuán privilegiados son por vivir en una tierra abundante en belleza, diversidad y recursos naturales. De esta manera, los estimula a valorar las dádivas que poseen, antes de que sea tarde. Adicionalmente, Ella indica que estas tierras, así como otras regiones del planeta, tienen un propósito dentro del Plan de Dios para estos tiempos.



Una fecha especial para el mundo

La Virgen Santísima, en Su Mensaje del 12 de octubre de 2019, afirmó que el festivo de Nuestra Señora Aparecida es importante para Brasil y para el mundo. La principal razón de esto es que, en esta ocasión, podemos recordar que Su Inmaculado Corazón nos ofrece un camino para la liberación de toda la esclavitud espiritual y material. Por lo tanto, que el divino símbolo de la Señora Aparecida sea honrado en muchos templos y hogares, ¡impulsando las almas a la unidad, la fraternidad y la redención!